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martes, 17 de marzo de 2015

17 de Marzo, San Patricio, Patrono y Obispo evangelizador de Irlanda


SAN PATRICIO
Patrono de Irlanda

Obispo

Martirologio Romano: San Patricio, obispo, que, siendo joven, fue llevado cautivo desde Gran Bretaña a Irlanda, y después, recuperada la libertad, quiso ser contado entre los clérigos y regresar a la misma isla, donde, hecho obispo, anunció con vehemencia el Evangelio y organizó con firmeza la Iglesia, hasta que en la ciudad de Down se durmió en el Señor (461).


Etimológicamente: Patricio = Aquel que es un patricio o noble, es de origen latino.

Biografía



Nacido en Gran Bretaña (Bennhaven Taberniae (pueblecito de Escocia que hoy no se encuentra en los mapas) hacia el 385, muy joven fue llevado cautivo a Irlanda, y obligado a guardar ovejas. Recobrada la libertad, abrazó el estado clerical y fue consagrado obispo Irlanda, desplegando extraordinarias dotes de evangelizador, y convirtiendo a la fe a numerosas gentes, entre las que organizó la Iglesia. Murió el año 461, en Down, llamado en su honor Downpatrik (Irlanda).


No se conoce con exactitud los datos cronológicos del Apóstol de Irlanda. Por lo que el santo dice de si mismo, se supone que era de origen romano-bretón. Su padre Calpurnio era diácono y oficial del ejercito romano; su madre era familia de San Martín de Tours; su abuelo había sido sacerdote ya que en aquellos tiempos no se había impuesto aún la ley del celibato sacerdotal en todo el occidente.

Se afirma que fue alrededor del año 403, a la edad de 16 años, que cayó prisionero de piratas junto con otros jóvenes para ser vendido como esclavo a un pagano del norte de Irlanda llamado Milcho. Lo sirvió cuidando ovejas. Trató de huir varias veces sin éxito.

La Divina Providencia aprovechó este tiempo de esclavitud, de rudo trabajo y sufrimiento, para espiritualizarlo, preparándolo para el futuro, ya que el mismo dijo que hasta entonces "aún no conocía al verdadero Dios", queriendo decir que había vivido indiferente a los consejos y advertencias de la Iglesia.

Se cree que el lugar de su cautiverio fue en las costas de Mayo, al borde del bosque de Fochlad (o Foclut). De ser así, el monte de Crochan Aigli, que fue escenario del famoso ayuno de San Patricio, también fue el lugar donde vivió los tristes años de su juventud.

Lo mas importante es que para entonces, como el lo dice: "oraba de continuo durante las horas del día y fue así como el amor de Dios y el temor ante su grandeza, crecieron mas dentro de mí, al tiempo que se afirmaba mi fe y mi espíritu se conmovía y se inquietaba, de suerte que me sentía impulsado a hacer hasta cien oraciones en el día y, por la noche otras tantas. Con este fin, permanecía solo en los bosques y en las montañas. Y si acaso me quedaba dormido, desde antes de que despuntara el alba me despertaba para orar, en tiempos de neviscas y de heladas, de niebla y de lluvias. Por entonces estaba contento, porque lejos de sentir en mi la tibieza que ahora suele embargarme, el espíritu hervía en mi interior".

Después de seis años en tierra de Irlanda y de haber rezado mucho a Dios para que le iluminara sobre su futuro, una noche soñó que una voz le mandaba salir huyendo y llegar hasta el mar, donde un barco lo iba a recibir. Huyendo, caminó mas de 300 kilómetros para llegar a la costa. Encontró el barco, pero el capitán se negaba rotundamente a transportarlo. Sus reiteradas peticiones para que le dejasen viajar gratis fueron siempre rechazadas, hasta que al fin, después de mucho orar con fervor, el capitán accedió a llevarlo hasta Francia. La travesía fue aventurada y peligrosa. Después de tres días de tormenta en el mar, tocaron tierra en un lugar deshabitado de la costa, caminaron un mes sin encontrar a nadie y hasta las provisiones se agotaron. Patricio narra esa aventura diciendo:
"llegó el día en que el capitán de la nave, angustiado por nuestra situación, me instaba a pedir el auxilio del cielo. ´¿Cómo es que nos sucede esto, cristiano? Dijiste que tu Dios era grande y todopoderoso, ¿por qué entonces no le diriges una plegaria por nosotros, que estamos amenazados de morir por hambre? Tal vez no volvamos a ver a un ser humano…´ A aquellas súplicas yo respondí francamente: ´Poned toda vuestra confianza y volved vuestros corazones al Señor mi Dios, para quien nada es imposible, a fin de que en este día os envíe vuestro alimento en abundancia y también para los siguientes del viaje, hasta que estéis satisfechos puesto que El tiene de sobra en todas partes´. Fue entonces cuando vimos cruzar por el camino una piara de cerdos; mis compañeros los persiguieron y mataron a muchos. Ahí nos quedamos dos noches y, cuando todos estuvieron bien satisfechos y hasta los perros que aún sobrevivían, quedaron hartos, reanudamos la caminata. Después de aquella comilona todos mostraban su agradecimiento a Dios y yo me convertí en un ser muy honorable a sus ojos. Desde aquel día tuvimos alimento en abundancia."

Finalmente llegaron a lugar habitado y así Patricio quedó a salvo a la edad de veintidós o veintitrés años y volvió a su casa. Con el tiempo, durante las vigilias de Patricio en los campos, se reanudaron las visiones y, a menudo, oía "las voces de los que moran mas allá del bosque Foclut, mas allá del mar del oeste y así gritaban todas al mismo tiempo, como si salieran de una sola boca, estas palabras: "Clamamos a ti, Oh, joven lleno de virtudes, para que vengas entre nosotros nuevamente". "Eternas gracias deben dársele a Dios, agrega, porque al cabo de algunos años el Señor les concedió aquello por lo que clamaban".

No hay ninguna certeza respecto al orden de los acontecimientos que se produjeron desde entonces.

Los primeros biógrafos del santo dicen que Patricio pasó varios años en Francia antes de realizar su trabajo de evangelización en Irlanda. Existen pruebas firmes de que pasó unos tres años en la isla de Lérins, frente a Canes, y después se radicó en Auxerre durante quince años mas. También hay sólidas evidencias de que tenía buenas relaciones personales con el obispo San Germán de Auxerre. Durante este tiempo le ordenaron sacerdote.

Algunos historiadores sostienen, que en esa época hizo un viaje a Roma y que, el Papa Celestino I fue quien le envió a Irlanda con una misión especial, ya que su primer enviado Paladio nunca logró cumplir porque a los doce meses de haber partido murió en el norte de Britania. Para realizar esa misión encomendada por el Pontífice, San Germán de Auxerre consagró obispo a Patricio.

Puesto que dependemos de datos confusos, legendarios y muchas veces contradictorios, de sus primeros biógrafos, es materialmente imposible obtener detalles del heroico trabajo en las tierras donde había estado cautivo. La tradición afirma que trabajó en el norte, en la región de Slemish, que dicen fue la misma donde Patricio cuidaba el ganado y oraba a Dios cuando era un joven esclavo. Una anécdota que antiguamente la tenían por auténtica en Irlanda relata que cuando el amo se enteró del regreso de Patricio convertido en venerado predicador, se puso tan furioso que prendió fuego a su propia casa, pereciendo en medio de las llamas.

Se afirma que, a su arribo a tierras irlandesas, San Patricio permaneció una temporada en Ulster, donde fundó el monasterio de Saúl y que con la energía que lo caracterizaba se propuso la tarea de conquistar el favor del "Gran Rey" Laoghaire, que vivía con su corte en Tara, de la región de Meath.

Utilizaba un lenguaje sencillo al evangelizar. Por ejemplo, para explicarles acerca de la Santísima Trinidad, les presentaba la hoja del trébol, diciéndoles que así como esas tres hojitas forman una sola verdadera hoja, así las tres personas divinas, Padre, Hijo y Espíritu Santo, forman un solo Dios verdadero. Todos lo escuchaban con gusto, porque el pueblo lo que deseaba era entender.

San Patricio y sus enemigos

Sus acérrimos opositores fueron los druidas, representantes de los dioses paganos. También sufrió mucho a manos de los herejes pelagianos, que para arruinar su obra recurrieron inclusive a la calumnia. Para defenderse, Patricio escribió su Confessio. Por fortuna poseemos una colección bastante nutrida de esos escritos, que nos muestra algo de el mismo, como sentía y actuaba.

Circulaba entre los paganos un extraño vaticinio, una profecía, respecto al santo, que Muirchu, su historiador nos transmite textualmente así: "Cabeza de azuela (referencia a la forma aplanada de la cabeza tonsurada) vendrá con sus seguidores de cabezas chatas, y su casa (casulla o casuela, es decir casa pequeña) tendrá un agujero para que saque su cabeza. Desde su mesa clamará contra la impiedad hacia el oriente de su casa. Y todos sus familiares responderán, Amén, Amén". Los augurios agregaban esto todavía: "Por lo tanto, cuando sucedan todas estas cosas, nuestro reino, que es un reinado de idolatría, se derrumbará".

En la evangelización, San Patricio puso mucha atención en la conversión de los jefes, aunque parece ser que el mismo rey Laoghaire no se convirtió al cristianismo, pero si, varios miembros de su familia. Consiguió el amparo de muchos jefes poderosos, en medio de muchas dificultades y constantes peligros, incluso el riesgo de perder la vida (mas de cinco veces) en su trato con aquellos bárbaros. Pero se notaba que había una intervención milagrosa de Dios que lo libraba de la muerte todas las veces que los enemigos de la religión trataban de matarlo. En un incidente que ocurrió en misión, su cochero Odhran, quizás por algún presentimiento, insistió en reemplazar al santo en el manejo de los caballos que tiraban del coche, por consiguiente fue Odhram quien recibió el golpe mortal de una lanza que estaba destinada a quitarle la vida a San Patricio.

No obstante los contratiempos, el trabajo de la evangelización de Irlanda, siguió firme. En varios sitios de Irlanda, construyó abadías, que después llegaron a ser famosas y alrededor de ellas nacieron las futuras ciudades. En Leitrim, al norte de Tara, derribó al ídolo de Crom Cruach y fue uno de los lugares donde edificó una de las iglesias cristianas. En la región de Connaught, realizó cosas notables. En la población de Tirechan se conservó para la posteridad la historia de la conversión de Ethne y Fedelm, hijas del rey Laoghaire. También existen las narraciones de las heroicas predicaciones de San Patricio en Ulster, en Leinster y en Munster.

Por su santidad, manifiesta en su carácter su lenguaje sencillo al evangelizar y por el don de hacer milagros, San Patricio logró muchas victorias sobre sus oponentes paganos y hechiceros. Ese triunfo le sirvió para que los pobladores de Irlanda se abrieran a la predicación del cristianismo. De hecho hacen referencias en los textos del Senchus Mor (el antiguo código de las leyes irlandesas) a cierto acuerdo concertado en Tara entre los paganos y el santo y su discípulo San Benigno (Benen). 
Dicen esos libros que "Patricio convocó a los hombres del Erin para que se reunieran todos en un sitio a fin de conferenciar con él. Cuando estuvieron reunidos, se les predicó el Evangelio de Cristo para que todos lo escucharan. Y sucedió que, en cuanto los hombres del Erin escucharon el Evangelio y conocieron como este daba frutos en el gran poder de Patricio demostrado desde su arribo y al ver al rey Laoghaire y a sus druidas asombrados por las grandes maravillas y los milagros que obraba, todos se inclinaron para mostrar su obediencia a la voluntad de Dios y a Patricio".

Hay muchas fantasías sobre las confrontaciones de San Patricio con los magos druidas pero también hay relatos que tienen un trasfondo sin duda histórico. Dicen que un Sábado Santo, cuando nuestro santo encendió el fuego pascual, se lanzaron con toda su furia a apagarlo, pero por más que trataron no lo lograron. Entonces uno de ellos exclamó: "El fuego de la religión que Patricio ha encendido, se extenderá por toda la isla". Y se alejaron. La frase del mago se ha cumplido; la religión católica se extendió de tal manera por toda Irlanda, que hoy sigue siendo un país católico, iluminado por la luz de la religión de Cristo, y que a su vez a dado muchos misioneros a la Iglesia.

El Sínodo

Hay muchas y buenas razones para creer que San Patricio convocó a un sínodo, seguramente en Armagh, no se mencionó el sitio. Muchos de los decretos emitidos en aquella asamblea, han llegado hasta nosotros tal como fueron redactados, aunque no cabe dudas que a varios de ellos se le hicieron añadiduras y enmiendas. En esa época San Patricio era ya un anciano con la salud quebrantada por el desgaste físico de sus austeridades y de sus treinta años de viajes de evangelización. Probablemente el sínodo haya tenido lugar cuando los días del santo ya estaban contados

Vida de Santidad

Solo llegaremos a comprender el hondo sentimiento humano que tenía el santo y el profundo amor a Dios que lo animaba, si estudiamos detenidamente sus escritos contenidos en las "Confesiones", la Lorica y la carta a Coroticus de San Patricio. Conoceremos el secreto de la extraordinaria impresión que causaba a los que lo conocían personalmente. Patricio era un hombre muy sencillo, con un gran espíritu de humildad. Decía que su trabajo misionero era la simple actuación de un mandamiento divino y que su aversión contra los pelagianos se debía al absoluto valor teológico que él atribuía a la gracia. Era profundamente afectuoso, por lo que vemos en sus escritos referirse tantas veces al inmenso dolor que le produjo separarse de su familia de sangre y de su casa, a la que le unía un gran cariño. Era muy sensible, le hacía sufrir mucho que digan que trabajaba en la misión que había emprendido para buscar provecho propio, por eso insistía tanto en el desinterés que lo animaban a seguir trabajando.

De sus Confesiones: "Incontables dones me fueron concedidos con el llanto y con las lágrimas. Contrarié a mis gentes y también, contra mi voluntad, a no pocos de mis mayores; pero como Dios era mi guía, yo no consentí en ceder ante ellos de ninguna manera. No fue por mérito propio, sino porque Dios me había conquistado y reinaba en mí. Fue El quien se resistió a los ruegos de los que me amaban, de suerte que me aparté de ellos para morar entre los paganos de Irlanda, a fin de predicarles el Evangelio y soportar una cantidad grande de insultos por parte de los incrédulos, que me hacían continuos reproches y que aun desataban persecuciones contra mí, en tanto que yo sacrificaba mi libertad en su provecho. Pero si acaso se me considera digno, estoy pronto a dar hasta mi vida en nombre de Dios, sin vacilaciones y con gozo. Es mi vida la que me propongo pasar aquí hasta que se extinga, si el Señor me concede esa gracia".

La santidad da frutos

El buen éxito de la misión de San Patricio se debe ante todo a su fe por la que se disponía a cualquier sacrificio y a la inteligente organización que supo crear en esa isla, carente de ciudades y dividida en muchas tribus o clanes, dirigidos por un jefe independiente cada una. El supo adaptarse a las condiciones sociales del lugar, formando un clero local, consagró obispos y sacerdotes y fundo monasterios y pequeñas comunidades cristianas dentro del mismo clan, sin rechazar usos ni costumbres tradicionales. Tuvo la feliz idea de que el obispo de cada región fuera al mismo tiempo el Abad o superior del monasterio más importante del lugar, así cada obispo era un fervoroso religioso y tenía la ayuda de sus monjes para enseñar la religión al pueblo. Las vocaciones que consiguió para el sacerdocio y la vida religiosa fueron muchísimas.

La obra de evangelización pudo progresar rápidamente gracias también a que San Patricio atrajo muchos discípulos fieles, como Benigno quién estaba destinado a sucederle. Siempre fue muy fiel a la Iglesia y, a pesar de la distancia, el santo se mantenía en contacto con Roma. En el año 444 se fundó la iglesia catedral de Armagh (hoy Armoc), la sede principal de Irlanda, dato que está asentado en los "Anales de Ulster". Es probable que no haya pasado mucho tiempo antes que Armagh se convirtiera en un gran centro de educación y administración.

San Patricio, en el transcurso de 30 años de apostolado, convirtió al cristianismo a "toda Irlanda". El propio santo alude, mas de una vez, a las "multitudes", a los "muchos miles" que bautizó y confirmó. "Ahí", dice San Patricio, "donde jamás se había tenido conocimiento de Dios; allá, en Irlanda, donde se adoraba a los ídolos y se cometían toda suerte de abominaciones, ¿cómo ha sido posible formar un pueblo del Señor, donde las gentes puedan llamarse hijos de Dios? Ahí se ha visto que hijos e hijas de los reyezuelos escoceses, se transformen en monjes y en vírgenes de Cristo". Sin embargo, como es lógico pensar, el paganismo y el vicio no habían desaparecido por completo. En las "Confesiones", que fueron escritas hacia el fin de su vida, dice el santo: "A diario estoy a la espera de una muerte violenta, de ser robado, de que me secuestren para servir como esclavo, o de cualquier otra calamidad semejante". Pero más adelante agrega: "Me he puesto en manos del Dios de misericordia, del Todopoderoso Señor que gobierna toda cosa y, como dijo el profeta: ´Deja tus cuidados con el Señor y El proveerá la manera de aliviarlos". En esta confianza estaba, sin duda su incansable valor y la firme decisión de San Patricio a lo largo de su heroica carrera. Su fortaleza de no permitir a los enemigos del catolicismo que propagaran por allí sus herejías, fue una de las razones para que Irlanda se haya conservado tan católica.

La obra del incansable misionero dio muchos frutos con el tiempo: Lo vemos en el maravilloso florecimiento de santos irlandeses. Logró reformar las leyes civiles de Irlanda, consiguió que la legislación fuera hecha de acuerdo con los principios católicos, lo cual ha contribuido a que esa nación se haya conservado firme en la fe por mas de 15 siglos, a pesar de todas las persecuciones.

Según un cronista de Britania, Nennius, San Patricio subió a una montaña a rezar y hacer ayuno y "desde aquella colina, Patricio bendijo al pueblo de Irlanda y, el objeto que perseguía al subir a la cima, era el de orar por todos y el de ver el fruto de sus trabajos…Después, en edad bien avanzada, fue a recoger su recompensa y a gozar de ella eternamente. Amén". Patricio murió y fue sepultado en el año 461, en Saúl, región de Stragford Lough, donde había edificado su primera iglesia.

Fuente: Corazones.org 

17 de Marzo, Santa Gertrudis de Nivelles, Abadesa


Gertrudis de Nivelles, Santa

Abadesa


Nació en Bravante (Bélgica) en el año 626, murió en Ivi el 17 de Marzo de 659.

Martirologio Romano: En Nivelles, en Brabante, santa Gertrudis, abadesa, la cual, nacida de muy preclara estirpe, recibió de san Amadeo el sagrado velo de las vírgenes, presidió sabiamente el monasterio construido por su madre y, asidua en la lectura de las Escrituras, consumió su vida con la austeridad de vigilias y ayunos (659).

Etimológicamente: Gertrudis = Aquella que es una defensora fiel, es de origen germánico.


Esta joven belga vivió y nació en el siglo VII. Era hija de Pipino de Landen, un señor noble de mucho prestigio y emparentado con Carlomagno. Cuando murió su padre, pensó en hacerse monja juntamente con su madre Ita.



Para ello fundaron dos conventos: uno para hombres y otro para mujeres, pero ambos estaban gobernados por la madre abadesa, que, en este caso, fue Ita hasta su muerte.



Después le sucedió Gertrudis, aunque todos los asuntos administrativos se los encargó a un hermano.



Su gran deber consistió en entregarse a dar cultura a aquella gente ignorante. Era la época de las grandes supersticiones. Por eso, le pidió a los obispos y abades de Irlanda que enviasen monjes para culturizar a su tierra, Brabante.



Lo mismo hizo con Roma. Quería que, o bien vinieran, o bien dejaran ir a la ciudad eterna a aprender liturgia y la forma de rezar.



Su fama crecía a pasos agigantados no sólo por la santidad de vida, sino también porque se convirtió en una excelente diplomática.



Sí, es cierto. Durante aquellos años había muchas guerrillas y luchas entre distintas familias señoriales.



Mediante su intervención logró llevar a todos la reconciliación y el perdón.

Murió muy joven, y su culto se extendió en seguida por todos sitios. 

Había un relicario del siglo XIII, pero un bombardeo de la Segunda Guerra Mundial lo destruyó.



¡Felicidades a quien lleve este nombre!



Por: P. Felipe Santos




17 de Marzo, Beato Juan Nepomuceno Zegrí y Moreno, Presbítero y Fundador


Juan Nepomuceno Zegrí y Moreno, Beato

Presbítero y Fundador
de la Congregación de las Hermanas de la Caridad
de la Santísima Virgen María de la Merced

Martirologio Romano: En la ciudad de Málaga, en España, beato Juan Nepomuceno Zegri y Moreno, presbítero, que consagró su vida en el ministerio al servicio de la Iglesia y de las almas, y, para procurar mejor la gloria de Dios Padre en Cristo, fundó la Congregación de las Hermanas de la Caridad de la Santísima Virgen María de la Merced (1905). 


Etimológicamente: Juan = Dios es misericordia, es de origen hebreo.


Juan Nepomuceno Zegrí y Moreno, fundador de la Congregación religiosa de las Hermanas Mercedarias de la Caridad, nació en Granada, el 11 de octubre de 1831, en el seno de una familia cristiana. Sus padres, don Antonio Zegrí Martín y doña Josefa Moreno Escudero, le dieron una esmerada y cuidada educación. Forjaron su rica personalidad en los valores humano‑evangélicos, haciendo de él un verdadero cristiano, comprometido con la causa de Jesucristo y de los pobres, desde su juventud. Fue un excelente estudiante y una gran persona. Cursó estudios de humanidades y de jurisprudencia, destacando por su inteligencia, pero, sobre todo, por su gran humanidad y por una intensa vida cristiana: dedicado a la oración y a la caridad con los pobres. 


Dios Padre, que llama a los que quiere para realizar sus grandes obras, le llamó a participar del sacerdocio de Jesucristo para servir a los seres humanos el Evangelio de la caridad redentora. Cursó sus estudios en el Seminario de San Dionisio de Granada, siendo ordenado sacerdote en la catedral de Granada el día 2 de junio de 1855. Ser sacerdote de Jesucristo fue su gran vocación, de tal manera que estaba dispuesto a los mayores sacrificios, con tal de realizar este sueño, alimentado desde su temprana juventud.

Como sacerdote estuvo en las parroquias de Huétor Santillán y de San Gabriel de Loja (Granada). En ambas parroquias desarrolló su vocación de pastor, a ejemplo del Buen Pastor, que da la vida por sus ovejas. Cuando tomó posesión de una de estas parroquias, dijo lo que quería ser para los demás desde la vocación que había recibido: como buen pastor, correr tras las ovejas descarriadas; como médico, curar los corazones enfermos a causa de la culpa y derramar sobre todos la esperanza; como padre, ser la providencia visible para todos aquellos que, gimiendo en la orfandad, beben el cáliz de la amargura y se alimentan con el pan de la tribulación. Su vida sacerdotal estuvo presidida por una profunda experiencia de Dios; un profundo amor a Jesucristo Redentor, con quien se configuró, aprendiendo desde el sufrimiento la obediencia; un gran amor a María, su sin igual Madre y protectora; una vida intensa de oración, fuente de caridad; una pasión grande por el Reino en sus pobres, y un intenso amor a la Iglesia, viviendo la comunión con ella, a pesar de la oscuridad de la fe y de los sufrimientos que le llegaron desde el seno de la misma Iglesia.

Fue un evangelizador infatigable. Le gustaba orar, reflexionar y escribir sus sermones. No decía lo que no oraba, y proclamaba lo que estaba en el centro de su corazón, inflamado por el amor de Dios. Anunciaba lo que creía. Su palabra invitaba a todos a vivir la vida cristiana con radicalidad y los sagrados vínculos de la religión cristiana. Toda su vida fue Eucaristía, pan partido para ser comido; celebración del amor de Dios en la entrega de su propia existencia. Y fue, también, reconciliación. Celebró el sacramento del perdón haciéndose perdón, misericordia y compasión para todos, especialmente para sus enemigos y para aquellos que le calumniaron.

Ostentó cargos importantes, pero él vivió la maravillosa humildad de Dios, revelada en el himno de la carta a los Filipenses 2,5. Fue examinador sinodal en las diócesis de Granada, Jaén y Orihuela; juez sinodal y secretario en oposiciones a curatos en la diócesis de Málaga; Canónigo de la catedral de Málaga y visitador de religiosas. También fue formador de seminaristas, predicador de su Majestad la Reina, Isabel II, y capellán real. 

Impactado por los problemas sociales y por las necesidades de los más desfavorecidos, se sintió llamado a fundar una Congregación religiosa para liberar a los seres humanos de sus esclavitudes. La funda bajo la protección e inspiración de María de la Merced, la peregrina humilde de la gratuidad de Dios, en Málaga, el 16 de marzo de 1878. El fin: Practicar todas las obras de misericordia espirituales y corporales en la persona de los pobres, pidiendo a las religiosas que todo cuanto hicieran fuera en bien de la humanidad, en Dios, por Dios y para Dios.

La Congregación, en pocos años, se extiende por muchas diócesis españolas bajo la exigencia de la dinamicidad de su inspiración carismática: Curar todas las llagas, remediar todos los males, calmar todos los pesares, desterrar todas las necesidades, enjugar todas las lágrimas, no dejar, si posible fuera en todo el mundo, un solo ser abandonado, afligido, desamparado, sin educación religiosa y sin recursos. 

El P. Zegrí, inflamado en el amor de Dios, llegó a decir que la caridad es la única respuesta a todos los problemas sociales y que no concluirá mientras haya un solo dolor que curar, una sola desgracia que consolar, una sola esperanza que derramar en los corazones ulcerados; mientras haya regiones lejanas que evangelizar, sudores que verter y sangre que derramar para fecundar las almas y engendrar la verdad en la tierra.

Probado como oro en el crisol, y enterrado en el surco de la tierra, como el grano de trigo, pues fue calumniado y apartado de la obra por él fundada, primero por la Iglesia, y después, por las mismas religiosas, muere un 17 de marzo de 1905 en la ciudad de Málaga, solo y abandonado, como él había decidido morir; a ejemplo del Crucificado, fijos los ojos en el autor y consumador de nuestra fe. Muere como fiel hijo de la Iglesia, y bajo el signo de la obediencia de la fe, como los grandes testigos y los grandes creyentes.

Elaboró una rica espiritualidad en la que hoy bebemos las religiosas, los mercedarios de la caridad y tantos laicos que, impactados por su vida, por la caridad que derramó en los pobres y por la forma en que decidió morir, quieren hacer camino de vida cristiana desde su inspiración carismática. Los ejes fundamentales de la misma son:

— la caridad redentora, para hacer beneficios a la humanidad y servir a los pobres el Evangelio del amor y de la ternura de Dios, pues la caridad, que es Dios, se manifiesta enjugando lágrimas, socorriendo infortunios, haciendo bien a todos y dejando a su paso torrentes de luz

— el amor y la configuración con Jesucristo Redentor, en su misterio pascual, pues el rasgo de amor místico que casi identifica con Jesucristo el corazón del hombre, desprendido de toda recompensa, es el sublime ideal de la caridad

— el amor a María de la Merced, pues Ntra. Sra. de las Mercedes es de todos y para todos, ya que no hay título más dulce, invocación más suave, nomenclatura más amplia que la merced y misericordia de María.

Vivió e hizo suyas todas las virtudes cristianas de manera heroica, sobre todo la fe, la esperanza y la caridad, y todas aquellas virtudes humanas que dan elegancia a la caridad y la hacen entrañable en las relaciones: humildad, afabilidad, dulzura, ternura, misericordia, bondad, mansedumbre, paciencia, generosidad, gratuidad y benevolencia. También se distinguió por su prudencia, por su fortaleza en el sufrimiento, por su transparencia en la búsqueda de la verdad y por el sentido de la justicia que tuvieron todos sus actos y decisiones. La Iglesia reconoció sus virtudes heroicas proclamándolo Venerable el día 21 de diciembre del año 2001. 

Dios Padre, por su intercesión, realizó un milagro, en la persona de Juan de la Cruz Arce, en la ciudad de Mendoza, Argentina, que la Iglesia ha considerado de segundo grado, restituyéndole el páncreas, que se le había extirpado totalmente en una intervención quirúrgica. 

Su vida es un desafío para todos los que seguimos su espiritualidad, no tanto por lo que hizo, sino porque supo amar a la manera de Dios, sirviendo el Evangelio de la caridad a los más necesitados. Él nos reveló que la ternura y la misericordia de Dios se hacen realidad en el corazón de los seres humanos por el misterio de la redención del Hijo y haciendo camino con Él. El P. Zegrí hizo camino de discipulado entregándose total y exclusivamente a Jesucristo crucificado, como podemos leer en su testamento espiritual, viviendo sus mismas actitudes y sentimientos, ofreciéndose totalmente a Él para bien de la humanidad; perdonando a quienes le calumniaron, no teniendo en cuenta el mal y creando lazos de comunión, de encuentro y de relación; construyendo humanidad nueva en aras de la caridad más exquisita y amando a María, la mujer nueva, que sostuvo su existencia en la fe y su fe anclada en el misterio de Dios.

Su beatificación, (realizada el 9 de noviembre de 2003), nos introduce a todos en la merced de Dios, en ese espacio de gratuidad en la que el Señor es jaris permanente, gracia liberada y redención de todo lo que oprime a los hombres y mujeres de hoy. A este testigo de la caridad de Dios nos encomendamos para que el Espíritu Santo transforme nuestra vida en fuego de amor, de tal manera que en nuestro camino de discipulado, y cargando sobre nuestros hombros los dolores de la humanidad, nos asemejemos a un astro que ilumina sin quemar, a una ráfaga que purifica sin destruir, a un arroyo que fecunda sin inundar.


Por: . | Fuente: Vatican.va 

17 de Marzo, San Juan Sarkander, Presbítero y Mártir



Juan Sarkander, Santo

Sacerdote y Mártir, Marzo 17 



Presbítero y Mártir

Martirologio Romano: En Olomuc, en Moravia, san Juan Sarkander, presbítero y mártir, que, siendo párroco de Holesov, por negarse revelar el secreto de confesión fue sometido al suplicio de la rueda y, arrojado a la cárcel cuando aún respiraba, falleció apenas un mes más tarde (1620).


Etimológicamente: Juan = Dios es misericordia, es de origen hebreo.



Jan Sarkander, sacerdote diocesano y mártir de la fidelidad al servicio ministerial, y en particular, al secreto del sacramento de la confesión, nació el 20 de diciembre de 1576 en la ciudad de Skoczbw, en Silesia, entonces en el principado de Cieszyn, que desde 1291 formaba parte del reino de Bohemia. Fue hijo de Gregorio Matias Sarkander y de Elena Gorecka. 

En 1593 ingresó en el colegio de los jesuitas en Olomouc para realizar los estudios superiores y de filosofía, que terminó en 1602 en Praga, con la consecución del titulo de Magister. Fue ordenado sacerdote en Brno, el 22 de marzo de 1609.

Sucesivamente, desempeñó su ministerio sacerdotal en la cura de almas en diversos lugares de la diócesis de Olomouc. Desde 1616 hasta su muerte, fue párroco en la ciudad de Holesov, sede del lugarteniente de Moravia, Ladislao Popel de Lobkovic, de quien fue consejero y confesor.

Su programa de renovación de la vida católica de la parroquia encontró grandes dificultades, sobre todo después de la insurrección de los nobles de Bohemia, en su mayor parte protestantes, contra el imperio de Austria.

El príncipe de Moravia, Wenceslao Bitovsky, protestante, lo mandó encarcelar en Olomouc con la acusación de traición a la patria. Se trataba de un pretexto de carácter político, porque en realidad lo hacia por odio a la fe católica.

El proceso se desarrolló del 13 al 18 de febrero de 1620. En calidad de confesor y consejero de Lobkovic, fue acusado de estar al tanto de la invasión militar de Moravia. Él se defendió diciendo que nada de eso le fue revelado en confesión, pero que, si hubiera sabido algo en la administración de ese sacramento no lo habría revelado de ninguna manera.

En los interrogatorios lo sometieron a numerosos tormentos, entre ellos el potro y la aplicación de antorchas encendidas. 

Herido e inconsciente fue arrojado a un calabozo húmedo y oscuro. Allí, después de un mes de sufrimientos a causa de los suplicios, murió el 17 de marzo de 1620. La noticia de una muerte tan cruel se difundió rápidamente y dio origen a una veneración que se ha mantenido hasta nuestros días, especialmente en Moravia, Silesia y en todas las regiones del ex imperio de Austria.

El proceso de beatificación fue introducido en 1715, pero las vicisitudes históricas poco favorables no permitieron concluirlo antes del 11 de septiembre de 1859. El Papa Pio IX lo proclamó beato, el 6 de mayo de 1860.

El domingo 21 de Mayo de 1995, en Olomouc (República Checa) Su Santidad Juan Pablo II lo canonizó.

Por: P. Ángel Amo | Fuente: Catholic.net 

17 de Marzo, San Gabriel Lalemant, Mártir Jesuita



San Gabriel Lalemant

Mártir jesuita, Marzo 17

Mártir Jesuita


Nació en París, Francia, el 3 de octubre de 1610.

Martirologio Romano: En la región de los hurones, en Canadá, pasión de san Gabriel Lalemant, presbítero de la Compañía de Jesús, que con celo valeroso difundió la gloria de Dios en el mismo idioma de los pueblos de aquel lugar, antes de que él mismo fuese torturado por los idólatras. Su memoria se celebra, con la de sus compañeros, el día diecinueve de octubre (1649).



Etimológicamente: Gabriel = Aquel que es el varón de Dios, es de origen hebreo.

Fue mártir en América del Norte, ayudante de San Juan de Brebeuf. 

En 1630 se unió a la Compañía de Jesús y en 1632 hizo voto de misionero. Sin embargo, estuvo por 14 años como profesor en diversos colegios jesuitas, como el Colegio de Moulins de 1632 a 1635, y en otros tres colegios. Estudió filosofía y teología en el Colegio de Bourges de 1635 a 1639. Viajó a Canadá, llegando a Quebec en 1646. Su tío jesuita Jerónimo Lalemant era en esos momentos el padre provincial de Canadá. Llegó a Canadá en 1646 y trabajó en la misión de San Ignacio en 1649.

El 16 de marzo, Gabriel y San Juan de Brebeuf fueron tomados prisioneros por los Iraquíes. 


17 de Marzo, Beata María Bárbara de la Santísima Trinidad Maix



María Bárbara De La Santísima Trinidad Maix 
Beata

Fundadora, 17 de marzo

Fundadora de la Congregación de las hermanas del Inmaculado Corazón de María

Martirologio Romano: En Catumbi, Rio de Janeiro, Brasil, Beata María Bárbara de la Santísima Trinidad (en el siglo Bárbara Maix), fundadora de la congregación de las hermanas del Inmaculado Corazón de María ( 1873)

Fecha de beatificación: 6 de noviembre de 2010, durante el pontificado de S.S. Benedicto XVI

Nació en Viena, Austria el 27 de junio de 1818, hija de José Maix y Rosalía Mauritz.

Los registros históricos nos dicen que José Maix era empleado público. Encontramos a su padre en el año 1782, trabajando como ayudante de cocina para el príncipe José Luis Lischtein. Poco después, en el año 1786, pasa a trabajar en el Palacio de Schönbrunn, en la función de ordenanza y luego chambelán del emperador.

Las muertes en la familia Maix eran frecuentes y la enfermedad una constante. Bárbara, la menor de 9 hijos del segundo matrimonio, tuvo su infancia y adolescencia marcada por muchas dificultades que le causaron debilidad en su organismo.

De hecho, fue muy difícil para el padre José Maix trabajar en el palacio donde se realizaban muchas fiestas, llenas de elegancia y lujo, y ver morir a sus hijos, uno tras otro, por no poder vencer, con el fruto de su trabajo, el hambre y la enfermedad. Vivían junto al palacio, en la casa número uno de los empleados.

En esta atmósfera de los contrastes entre el lujo y la abundancia del palacio con la pobreza y el dolor en su familia, se fue formando la personalidad de Bárbara. Hereda de sus padres la fe cristiana, el espíritu de lucha y resistencia, la tenacidad constante para resistir lo que tocara vivir, el coraje para enfrentar el imperio del lujo ante las apremiantes necesidades de la familia. Es el amor sin los límites por la vida lo que la hace fuerte, intrépida, llena de energía. Ella aprende de los sufrimientos diarios a no dejarse vencer frente a las dificultades, por más grandes que estas sean.

Desde temprana edad, manifiesta un espíritu misionero y profético frente a los desafíos de la realidad:
En tiempos de guerra, en los que el estado prohíbe la fundación de congregaciones religiosas, reúne jóvenes y con ellas inicia el proyecto de las Hermanas del Inmaculado Corazón de María.


Ante una situación social de desempleo en la que el mayor número de nacimientos correspondían a madres solteras, abre una casa de huéspedes para albergar a empleadas domésticas, dándoles orientación y asistencia, evitando que cayeran en la prostitución y otras desigualdades sociales.

Perseguida por el contexto político-económico de Viena y ante la necesidad de salir del país, planea ir a América del Norte, mas las circunstancias hacen que junto a 21 compañeras viaje a Brasil, país del que no conoce ni su cultura ni su geografía. Escribiendo a una compañera le dice: "Llegamos a Río de Janeiro el 9 de noviembre (1848), sin dinero, sin conocer a nadie, sin conocer el idioma, con mucha hambre, pero llenas de confianza en Dios y en Nuestra Señora
.

En una época en que las mujeres no tenían participación social, acceso a los conocimientos y a la educación escolar, se convirtió en educadora y permitió el estudio a las niñas, especialmente a las huérfanas y pobres.

Atenta a los hechos, percibe otras necesidades de la época: asilos y pensionados. Ante las epidemias de cólera y fiebre amarilla y por la Guerra con Paraguay, se hace cargo de las actividades en dispensarios y hospitales.

Frente a una sociedad que mantiene el sistema de la esclavitud, María Bárbara no acepta que las personas que trabajan junto a las Hermanas lo hagan en condiciones de esclavitud, todos realizan los mismos servicios y tienen los mismos derechos en una relación de total igualdad y colaboración.

En un contexto en el que las órdenes religiosas eran de estilo puramente contemplativa, María Bárbara hace una innovación: una forma de Vida Consagrada forjada para el trabajo profano y social. Este modelo de la Vida Religiosa era nuevo tanto para la Iglesia como para el gobierno. Ella fundó el 8 de mayo de 1849 la primera congregación femenina de vida activa en Brasil.

Con inteligencia, abre nuevos caminos, vence los obstáculos y se enfrenta firmemente los problemas de orfandad, opresión y autoritarismo de la época.

María Bárbara, mujer de fe, discierne la realidad, toma decisiones, como la de no realizar aquellas tareas que no ayuden al estilo de vida exigido en el Proyecto de la Congregación. "... Yo no creo que haya autoridad en la tierra que me obligaría a hacer nada en contra de mi conciencia. No somos esclavos, Señor Administrador. Somos libres por la misericordia de Dios
.

Su vida dedicada toda a Dios y a los hermanos, especialmente a los más necesitados, fue señalada por muchos sufrimientos, enfermedades, pobreza y luchas. Siguiendo el ejemplo de la Virgen María, se entregó totalmente a la Voluntad del Padre, María Bárbara respondió que sí a la llamada del Señor.

Murió el 17 de marzo de 1873, dejando en herencia
LA BÚSQUEDA CONTINUA DE LA VOLUNTAD DE DIOS, ATENTAS A LOS APELOS DE LA IGLESIA EN CADA MOMENTO HISTORICO, el perdón, la vivencia fraterna, escuchar la palabra de Dios, el coraje, la osadía y la defensa de la dignidad humana..

Sus restos mortales se conservan en la Capilla de S. Rafaele, Rua Riachuelo, 508, Porto Alegre, RS
Brasil
.

Fuente: icmsec.webnode.com 

jueves, 12 de marzo de 2015

Semana de San Expedito "Intercesor en causas justas y de urgente solución"


San Expedito

"Intercesor en causas justas y de urgente solución"


Nombre: San Expedito
Nacimiento: S IV
Fallecimiento: 19 de Abril del año 303 DC


San Expedito es contemporáneo de Santa Filomena y San Jorge. Vivió a principios del siglo IV bajo el imperio de Diocleciano, emperador que años más tarde lo mandaría a matar, y era el comandante de una legión de soldados romanos.

A pesar de defender al Imperio Romano de los Bárbaros Asiáticos, cierto día fue tocado por la gracia de Dios y recibió la Luz Divina; este episodio cambiaría para siempre su vida convirtiéndose inmediatamente al cristianismo.

Al momento de su conversión, un cuervo se hizo presente simbolizando al Espíritu del Mal y le dijo Cras... Cras... Cras... , (lo que en latín siginifica Mañana ... Mañana... Mañana...) intentando persuadirlo en la misma hora de su conversión al Cristianismo a que lo dejara para después.
San Expedito reaccionó enérgicamente aplastando al cuervo con su pie derecho mientras exclamaba Hodie... Hodie... Hodie (que en latín significa Hoy... Hoy... Hoy... ) no dejare nada para mañana, a partir de hoy seré Cristiano.

El 19 de abril de 303 DC, por orden del Emperador Diocleciano, fue sacrificado en Melitene, sede de una de las Provincias Romanas en Armenia junto con sus compañeros Caio, Galatas, Hermogenes, Aristonico y Rufo.

Por su historia es que San Expedito es un Santo que atiende los casos urgentes, en este mismo momento; los casos que, de producirse una demora, habría un gran perjuicio. Pero este santo Patrono, no atiende para ser venerado, sino para que en acción de gracias nos acerquemos a Dios, sin postergaciones, siguiendo su ejemplo; y en el caso de haber efectuado alguna promesa, él también nos pide presteza en cumplir aquello que le fue prometido.

San Expedito es reconocido por el Don que Nuestro Padre Misericordioso le dio para resolver nuestras necesidades en formas urgente pero también es Patrono de los Jóvenes, Socorro de los Estudiantes, Mediador en los Procesos y Juicios, Salud de los Enfermos, Protector en los Problemas de Familia, Laborales y Negocios, pudiendo ser invocado en otros casos.

ORACIONES


Querido Santo, acuérdate de nosotros,

como nosotros nos acordamos de ti.
Danos en este nuevo año bienestar y salud,
y nosotros nos entregaremos a ti, como siempre.
Querido Santo, ten piedad de nosotros,
escucha nuestras plegarias,
no abandones a quienes más te necesitamos,
e intercede por nosotros ante nuestro Señor.
Querido Santo, que nuestra voz llegue a tus oídos,
y que a los oídos de los más necesitados llegue tu voz.
Querido Santo, danos un año de paz!

Amén


Señor, ten piedad de mí. 

Jesucristo, ten piedad de mí. 
Señor, ten piedad de mí. 
Jesucristo, óyenos. 
Jesucristo, escúchanos. 
Padre Celestial, que sos Dios, ten piedad de mí. 
Dios Espíritu Santo, ten piedad de mí. 
Santa María, Reina de los Mártires, ruega por mi. 
San Expedito, invencible atleta de la Fe, ruega por mi. 
San Expedito, fiel hasta la muerta, ruega por mi. 
San Expedito, que todo perdiste para ganar a Jesús, ruega por mi. 
San expedito, que fuiste atormentado, ruega por mi. 
San Expedito, que pereciste gloriosamente por la espada, ruega por mi. 
San Expedito, que recibiste del Señor la Corona de Justicia que prometió a los que le aman, ruega por mi. 
San Expedito, auxilio de los que pierden cosas, ruega por mi. 
San Expedito, patrono de la juventud, ruega por mi. 
San Expedito, auxilio de los estudiantes, ruega por mi. 
San Expedito, modelo de soldado, ruega por mi. 
San Expedito, patrono de los viajeros, ruega por mi. 
San Expedito, salvación de los enfermos, ruega por mi. 
San Expedito, consolador de los afligidos, ruega por mi. 
San Expedito, apoyo fiel de los que esperan en vos, ruega por mi. 
San Expedito, yo te suplico, no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, ven a mi auxilio. 
Jesús, Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdóname Señor. 
Jesús, Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchame Señor. 
Jesús, Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de mi Señor.
Jesús, óyeme. 
Jesús, escucha mi oración. 
Que mi voz llegue a ti, Señor.


Oración al Poderoso San Expedito
Mi San Expedito de las causas justas y urgentes, intercede por mi junto a Nuestro Señor Jesucristo, para que venga en mi socorro en esta hora de aflicción y desesperanza. Mi San Expedito tú que eres el Santo guerrero. Tú que eres el Santo de los afligidos. Tú que eres el Santo de los desesperados. Tú que eres el Santo de las causas urgentes, protégeme, ayúdame, otorgándome: fuerza, coraje y serenidad. ¡Atiende mi pedido! (hacer el pedido).

Mi San Expedito, ayúdame a superar estas horas difíciles, protégeme de todos los que puedan perjudicarme, protege a mi familia, atiende mi pedido con urgencia. Devuélveme la Paz y la tranquilidad. ¡Mi San Expedito! Estaré agradecido por el resto de mi vida y propagaré tu nombre a todos los que tienen Fe. Muchas Gracias.


Santo de los urgente, Santo de lo justo, intercede por mí ante nuestro Señor Jesucristo para la pronta atención a mí pedido. No olvides en él la protección y bienestar para mí familia y todas aquellas almas que estén desesperanzadas.

Oh Mi San Expedito! Atiende mi pedido y por siempre estaré agradecido y propagaré tú nombre y misericordia fielmente. Amén. (Hacer el pedido)
Video para acompañarte a rezar: https://www.youtube.com/watch?v=Kc9x1RtcAnI 

TRIDUO

Cuando tengan un pedido muy urgente, rezen este triduo a San Expedito para que vuestra gracia se conceda rápidamente. 

*Primer día

"Glorioso San Expedito, vengo a implorar tu socorro y obtener de Dios, por tu intercesión, las gracias que solicito de su misericordiosa bondad.

Admiro tu dedicación y fidelidad al deber de estado. Por la manera por la cuál desempeñaste tus deberes de soldado y de jefe, enseñaste a todos que no hay estado de vida en el que no podamos santificarnos. Basta para eso cumplir cristianamente todas las obligaciones.
Concédeme pues, por los méritos que adquiriste delante de Dios en el cumplimiento de estos deberes, la gracia de cumplir yo también fielmente, los de mi propio estado sin jamás lamentarme ni acobardarme.
Concédeme además de eso, las gracias que solicito del cielo durante este Triduo.
Amén".

Rezar un Padre nuestro, Ave María y Gloria.

*Segundo día

"Gloriosos San Expedito, yo admiro en tí la rapidez con que en cualquier ocasión actuabas para el cumplimiento de tu deber. Por eso eres el modelo de la generosidad y del celo con que debemos dedicarnos al trabajo, muy especialmente de nuestra santificación.

Por los méritos que adquiriste de este modo, ven en auxilio de mi tibieza en la práctica de la virtud, a fin de que me separe completamente de los lazos que me ligan al pecado y que pueda darme más enteramente al servicio de Dios y del prójimo con generosa actitud.
Concédeme además de eso, las gracias que solicito del cielo durante este Triduo.
Amén".

Rezar un Padre nuestro, Ave María y Gloria.

*Tercer día

"Glorioso San Expedito, la prueba y el sufrimiento nunca te fueron evitados. Supiste aceptarlos con coraje y confianza. Y con el fin de asemejarte más al Divino Crucificado, no rehusaste de verter tu sangre por él. ¡Cuán lejos estoy de imitarte! Ante las menores pruebas y dificultades cotidianas, me lamento, gimo y a veces me revuelco, en vez de aceptarla fillialmente como venidas de la Divina Providencia.

Enséñame pues, a no lamentarme jamás y antes aceptar generosamente, para purgar mis faltas, todas las cruces que me reserva la Divina Providencia.
Concédeme además de eso, las gracias que solicito del cielo durante este Triduo.
Amén".

Rezar un Padre nuestro, Ave María y Gloria.


NOVENA

Estas son las oraciones participantes de la novena, más adelante explicamos el procedimiento día por día.

*Oración diaria a San Expedito
"Señor, Dios y Padre nuestro que nos permites invocar a San Expedito como intercesor, especialmente en las causas que consideremos justas y urgentes, te suplicamos que en esta hora de aflicción y desesperanza nos asistas con tu gracia
Escucha Señor nuestra oración, llegue a ti nuestro clamor. Ayúdanos a superar este momento difícil; protégenos de todo lo que pueda perjudicarnos y asiste a nuestros familiares y amigos.
Devuélvenos la paz y la tranquilidad y concédenos la gracia de una pronta y definitiva conversión.
Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén".



* Gozos
"Acudimos hacía ti san Expedito bendito para aprender de tu vida el seguimiento de Cristo.
Servir al emperador ofrece promesas varias que se convierten en soplo cuando llega la mañana.
Acudimos hacía ti san Expedito bendito para aprender de tu vida el seguimiento de Cristo.
Postergar la decisión es el consejo del cuervo pero Cristo dice “hoy” al que quiere se su siervo.
Acudimos hacía ti san Expedito bendito para aprender de tu vida el seguimiento de Cristo.
La decisión de Jesús lleva al martirio y la muerte pero desde ellos resurge una vida que es más fuerte.
Acudimos hacía ti san Expedito bendito para aprender de tu vida el seguimiento de Cristo.
Eligiendo en nuestra vida servir de verdad a Cristo podemos volvernos libres sin estorbos, expeditos.
Acudimos hacía ti san Expedito bendito para aprender de tu vida el seguimiento de Cristo.


Tú que estas gozando la corona de la gloria 
haz que la verdad u justicia 
logren pronto la victoria.


Acudimos hacía ti san Expedito bendito 
para aprender de tu vida 
el seguimiento de Cristo".




* Oración de Conclusión
"Señor, Dios nuestro, Padre misericordioso y compasivo, que tanto amas a los seres humanos que enviaste a tu Hijo único al mundo, no para juzgarnos sino para salvarnos, concédenos la gracia de una sincera conversión de mente y de corazón.
Permítenos buscar tu reino y su justicia, sabiendo que todo lo demás nos vendrá por añadidura.
Tranquiliza nuestro pobre corazón que tantas veces se engaña pensando que nos hará feliz conseguir algo que no sea tú mismo.
Y que la poderosa intercesión de tu glorioso mártir San Expedito, que con fe hemos invocado, nos alcance lo que te pedimos, en la medida en que no se oponga a tu santa Voluntad.
Por Jesucristo, Nuestro Señor, Amén".



Comienzo de la Novena, leer las oraciones y lecturas en el orden marcado:


* Día Primero: Jesús, las iglesias y los atribulados.




Oración Diaria:
Lectura Bíblica (apoc 1,9-13ª. 17-19.20b)

Yo, Juan, hermano de ustedes, con quienes comparto las tribulaciones, el Reino y la espera perseverante en Jesús, estaba exiliado en la isla de Patmos, a causa de la Palabra de Dios y del testimonio de Jesús. El día del señor fui arrebatado por el Espíritu y oí detrás de mi una voz fuerte como una trompeta, que decía: “Escribe en un libro lo que ahora vas a ver y mándalo a las siete Iglesias: a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea”. Me di vuelta para ver de quien era esa voz que me hablaba, y vi siete candelabros de oro, y en el medio de ellos, a alguien semejante a un Hijo de hombre... Al ver esto, caí a sus pies, como muerto, pero él, tocándome con su mano derecha, me dijo: “No temas: yo soy el Primero y el Último, el Viviente. Estuve muerto, pero ahora vivo para siempre y tengo la llave de la Muerte y del Abismo... Escribe lo que has visto, lo que sucede ahora y lo que sucederá en el futuro... los siete candelabros son las siete Iglesias.

Meditación:

El correo del emperador romano, en Asia Menor, partía de la capital de Provincia, Éfeso, y recorría por orden las ciudades mencionadas, llevando las órdenes imperiales. Muchas veces, éstas agravaban las tribulaciones de los cristianos.

Frente a los decretos arbitrarios del emperador terreno, el Cristo que sufrió la muerte envía a sus Iglesias una palabra de consuelo. Puede pronunciarlas porque fue “muerto y ahora vive para siempre” y está presente en medio de su Iglesia.
Su presencia se hace manifiesta en la celebración del Día del Señor que congrega a Juan y a sus hermanos y los hace compartir junto a las tribulaciones, el Reino y la espera perseverante de Jesús.
Hoy sigue manifestándose a nosostros si en medio de la tribulaciones seguimos fieles a su Reino y perseveramos en la espera de Jesús.

Compromiso
Descubro la presencia cotidiana del amor de Dios Padre, aún en las cosas más pequeñas e insignificantes y le pido que me ayude a ser fiel a mis compromisos cristianos.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Segundo: Una carta de Jesús para los cristianos de Éfeso

Oración Diaria:
Lectura bíblica (apoc 2,1-5.7)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Éfeso: “El que tiene en su mano derecha las siete estrellas y camina en medio de los siete candelabros de oro, afirma: - Conozco tus oras, tus trabajos y tu constancia. Sé que no puedes tolerar a los perversos; has puesto a prueba a quienes usurpan el título de apóstoles, y comprobaste que son mentirosos. Sé que tienes constancia y que has sufrido mucho por mi Nombre sin desfallecer. Pero debo reprocharte que hayas dejado enfriar el amor que tenías al comienzo. Fíjate bien desde dónde has caído, conviértete y observa tu conducta anterior. Si no te arrepientes, vendré hacía ti y sacaré tu candelabro de su lugar preeminente...-. El que pueda entender, que entiende lo que el Espíritu, dice a las Iglesias: "al vencedor, le daré de comer del árbol de la vida, que se encuentra en el Paraíso de Dios.”

Meditación:

En esta carta como en las que siguen. Cristo señala que conoce los méritos de sus seguidores. Aquí se trata de la constancia en su seguimiento presente entre los cristianos de Éfeso y los sufrimientos que por él han tenido que soportar.

Pero también señala las defecciones de esa misma Iglesia y su pérdida del amor primero. Advierte que ello puede acarrearle el alejamiento de la presencia divina: “sacaré tu candelabro”.
La carta se concluye con una promesa de salvación que en este caso se trata de una total reincorporación a la vida divina que gozaba Adán antes del pecado.
También para nosotros la verdadera vida sólo puede encontrarse en la constancia del seguimiento de Jesús y en la renovación del amor que le profesamos.


Compromiso:

Examino mis actos cotidianos y trato de descubrir si los hago por simple rutina, aunque sean bueno, pero sin amor. Trato de descubrir a alguien que está sufriendo cerca de mí e intento acompañarlo.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Tercero: Una carta de Jesús para los cristianos de Esmirna.

Oración Diaria: 
Lectura bíblica (Apoc 2,8-9ª.10-11)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Esmirna: “El Primero y el Último, el que estuvo muerto y ha revivido, afirma: - Conozco tu tribulación y tu pobreza, aunque eres rica. No temas por lo que tendrás que padecer: mira que el demonio va a arrojar en la cárcel a algunos de ustedes para que sean puestos a prueba, y tendrán que sufrir durante diez días. Sé fiel hasta la muerte y te daré la corona de la vida -. El que pueda entender, que entienda, lo que el Espíritu dice a las Iglesias; la segunda muerte no dañara al vencedor”

Meditación:

Lo aparente es muchas veces engañoso. La visión que tenemos de lo que sucede induce frecuentemente a error. Por eso lo que parece pobreza de la Iglesia de Esmirna es riqueza delante de Dios.

Como consecuencia se alienta a soportar las dificultades que acarrea la lucha contra las injusticias. Se señala que ellas son una prueba temporaria para la comunidad cristiana que busca la verdadera justicia. La fidelidad a Jesús hasta la muerte recibirá como recompensa la corona de la vida y no deberá experimentar ningún otro tipo de muerte.
Compromiso:
Estoy atento a no dejarme llevar por las apariencias, a ser menos superficial y materialista. Trato de evitar o denunciar momentos de injusticia en el ámbito familiar, laboral o social.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Cuarto: Una carta de Jesús para los cristianos de Pérgamo

Oración Diaria:
Lectura bíblica (Apoc 2,12-14.17)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Pergamo: “El que tiene la espada de doble filo afirma: - Sé que tu habitas donde está el trono de Satanás. A pesar de todo, permaneces fiel a mi Nombre y no has regresado de tu fe en mí, ni siquiera en la época de Antipas, mi testigo fiel, al que mataron en el lugar donde habita Satanás. Sin embargo, debo reprocharte algo, y es que tienes adictos a la doctrina de Balaam, el que enseño a Balac cómo debía seducir a los israelitas para que se prostituyeran, comiendo los alimentos sacrificados a los ídolos... Arrepiéntete, o iré enseguida para combatirlos con la espada de mi boca -. El que pueda entender, que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias: al vencedor, le daré de comer el maná escondido, y también le daré una piedra blanca, en la que está escrito un nombre nuevo que nadie conoce fuera de aquel que lo recibe”.

Meditación:

En medio de un mundo dominado por valores opuestos al querer de Dios. “Donde está el trono de Satanás”, la comunidad cristiana proclama con fidelidad el mensaje del Evangelio. Sin embrago, también en ella existen personas que se “casan” con el ídolo del poder, buscando obtener ventajas.

Como en aquellos tiempos, ahora se insiste en la fidelidad confiando que, como el pueblo de Israel en el desierto, recibirá el maná, alimento divino y entrará en una intimidad con Dios mismo, imposible de superar, ya que se le promete un nombre nuevo que sólo él y Jesús conocen.
Compromiso:
Trato de tener el corazón abierto para descubrir aquellas actitudes impositivas o autoritarias que no me permiten ser una mujer, un hombre nuevo. Pido perdón a las personas que con frecuencia soportan estas mismas actitudes.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Quinto: Una carta de Jesús para los cristianos de Tiatira

Oración Diaria: 
Lectura bíblica (Apoc 2,18-20.26-29)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Tiatira: “El hijo de Dios, el que tiene los ojos como llamas de fuego y los pies semejantes al bronce fundido, afirma: - Conozco tus obras, tu amor, tu fe, tu servicio y tu constancia. Sé también que tus últimas obras son más abundantes que las primeras. Pero debo reprocharte que toleras a Jezabel, esa mujer que pretende ser profeta, la que engaña a todos mis servidores, y les enseña a prostituirse comiendo alimentos sacrificados a los ídolos... Al vencedor, al que permanezca fiel hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones. Él las regirá con un cetro de hierro y las destrozará como a un vaso de arcilla, con el mismo poder que yo recibí del Padre y también le daré la Estrella de la mañana -. El que pueda entender que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias”.

Meditación:

La comunidad cristiana es alentada por su actuación y el crecimiento de su fidelidad. Sin embargo, también aquí existen personas que causan muerte, como Jezabel la reina cruel que persiguió a Elías y mató a Nabot para quitarle la herencia de sus padres. También ahora adorar a los ídolos sigue causando injusticia y muerte a nuestro alrededor.

También a nosotros se nos promete un poder al que no se podrá resistir porque se origina en el Padre de Jesús y se concede a éste y a sus discípulos. Con esta confianza podremos seguir firmes sin dejarnos engañar por falsas promesas que los poderes de turno ofrecen.
Compromiso:
Intento liberarme de las falsas promesas humanas que obstaculizan mi camino, renuevo mi confianza en el obrar de Dios allí donde los hombres no pueden transformar el mal en bien y le pido a Jesús que me ayude a ser más firme en la fe.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Sexto: Una Carta de Jesús para los Cristianos de Sardes

Oración Diaria:
Lectura bíblica (Apoc 3,1-6)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Sardes: “El que posee los siete espíritus de Dios y las siete estrellas afirma: - Conozco tus obras. Aparentemente vives, pero en realidad estás muerto. Permanece alerta y reanima lo que todavía puedes rescatar de la muerte, porque veo que tu conducta no es perfecta delante de mi Dios. Rcuerda cómo has recibido y escuchado la Palabra: consérvala fielmente y arrepiéntete. Porque si no vigilas, llegaré como un ladrón, y no sabrás a qué hora te sorprenderé. Sin embargo, tienes todavía en Sardes algunas personas que no han manchado su ropa: ellas me acompañarán vestidas de blanco, porque lo han merecido. El vencedor recibirá una vestidura blanca, nunca borraré su nombre del Libro de la Vida y confesaré su nombre delante de mi Padre y de sus Ángeles -. El que pueda entender que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias.



Meditación:

De nuevo Cristo pone en evidencia el sentido más profundo de la actuación humana. En este caso, los cristianos de Sardes se han apartado de los compromisos que recibieron y escucharon la Palabra. Es necesario revivir este entusiasmo inicial porque el Señor Jesús volverá como un ladrón y debe encontrarlos preparados, en actitud permanente de vigilia.

Sin embargo, dentro de este ambiente de infidelidad existen personas que siguen defendiendo la vida de Dios y el proyecto de Jesús, simbolizados con la vestidura blanca, sin manchas. Esta imagen, también hace referencia a las vestiduras blancas que llevaban los catecúmenos el día de su bautismo.
Se promete para todos ellos una vestidura semejante. Y junto con ella la seguridad que estarán escritos para siempre en el Libro de la Vida. Como ellos han proclamado a Cristo delante de los hombres, Cristo los presentará como sus amigos ante Dios y sus ángeles.


Compromiso:
Renuevo las promesas bautismales y defiendo todas las situaciones que engendren y sostengan el respeto por la vida.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Séptimo: Una carta de Jesús para los cristianos de Filadelfia

Oración Diaria:
Lectura bíblica (Apoc 3,7-8.10ª 11-13)

Escribe al Ángel de la Iglesia de Filadelfia: “El Santo, el que dice la Verdad, el que posee la llave de David, el que abre y nadie puede cerrar, el que cierra y nadie puede abrir, afirma: - Yo conozco tus obras: he abierto delante de ti una puerta que nadie puede cerrar, porque a pesar de tu debilidad, has cumplido mi Palabra sin renegar de mi Nombre. Ya que has cumplido mi consigna, de ser constante, yo también te preservaré en la hora de la tribulación... Yo volveré pronto, conserva firmemente la corono. Haré que el vencedor sea una columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí. Y sobre él escribiré el nombre de mi Dios y el nombre de la Ciudad de mi Dios –la nueva Jerusalén que desciende del cielo y viene de Dios- y también mi nombre nuevo -. El que pueda entender que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias”.

Meditación:

La única salida auténtica para nuestras dificultades es la puerta abierta por Cristo para la humanidad. Los débiles comprendes esto cuando se aferran a las promesas contenidas en la Palabra de Dios y se mantienen fieles al Nombre de Jesús.

Jesús estará con ellos aunque sufran por la injusticia y esa presencia se hará plenitud de gozo, “corona”, cuando vuelva definitivamente.
La vida habrá servido para construir un Templo indestructible y una nueva Ciudad plena de Justicia. Nuestro compromiso por las causas justas son una anticipo de ese Templo y de esa Ciudad que anhelamos.

Compromiso:
Trato de transformar todas las situaciones de sufrimiento en momentos de encuentros de gozo y alegría con Jesús y con la comunidad.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Octavo: Una carta de Jesús para los cristianos de Laodicea

Oración Diaria:
Lectura bíblica (Apoc 3,14-22)

Escribe el Ángel de la Iglesia de Laodicea: “El que es el Amén, el Testigo fiel y verídico, el Principio de las obras de Dios afirma: - Conozco tus obras: no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! Por eso, porque eres tibio, te vomitaré de mi boca. Tú andas diciendo: Soy rico, estoy lleno de bienes y no me falta nada. Y no sabes que eres desdichado, digno de compasión, pobre ciego y desnudo. Por eso, te aconsejo: cómprame oro purificado en el fuego para enriquecerte, vestidos blancos para revestirte y cubrir tu vergonzosa desnudez, y un colirio para ungir tus ojos y recobrar la vista. Yo corrijo y reprendo a los que amo. ¡Reanima tu fervor y arrepiéntete! Yo estoy junto a la puerta y llamo: si alguien oye mi voz y me abre, entraré en su casa y cenaremos juntos. Al vencedor lo haré sentar conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono -. El que pueda entender, que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias”.

Meditación:

En esta carta encontramos una dura advertencia a los cristianos de Laodicea. Dos motivos los fundamentan: su falta de decisión y la incomprensión de su situación. Se señalan trágicas consecuencias de esta falta de decisión: Porque este tibio te vomitaré de mi boca. Se muestra también su engaño en la evolución que hace de su estado: lo que considera riqueza, visión y ropaje es, en realidad pobreza, ceguera y desnudez.

De allí la urgente llamada al arrepentimiento, a la que acompaña siempre una promesa. Compartir la cena con Dios es el premio que le espera a todos aquellos que están dispuestos a dejarlo entrar cuando llama a la puerta.

Compromiso:

Examino mi vida y trato de descubrir como reacciono cuando mi fe es cuestionada: ¿Callo? ¿Me justifico? ¿Dialogo? Me comprometo a no ser tibio y a aceptar las consecuencias que mis convicciones de fe puedan provocar a mi alrededor.
Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.




* Día Noveno: Conversación con el Señor Jesús

Oración Diaria: 
Lectura bíblica (Apoc 22,16-17.20-21)


Yo, Jesús, he enviado a mi mensajero para dar testimonio de estas cosas a las Iglesias: Yo soy el Retoño de David y su descendencia, la Estrella radiante.

El Espíritu y la Esposa dicen: “¡Ven!”, y el que escucha debe decir “¡Ven!”. Que venga el que tiene sed, y que quiera que beba gratuitamente del agua de la vida.
El que garantiza estas cosas afirma: “¡Si, volveré pronto!” ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! Que la gracia del Señor Jesús permanezca con todos. Amén.


Meditación:

El que ha aceptado los mensajes de Jesús y de Juan, su mensajero, puede reconocer que toda causa está en el horizonte de sus preocupaciones.

Por ello espera que la presencia del Retoño de David se haga definitiva y no solo por medio de sus mensajes. De allí el grito “Ven” que brota en la boca de los miembros de las comunidades cristianas que se expresa en el Padre Nuestro cuando decimos: Que venga tu Reino y que se haga tu voluntad.
Él, delante de nosotros, sigue asumiendo su compromiso de un pronto retorno al que debemos prepararnos.

Compromiso:
A partir de hoy me comprometo a aceptar que detrás de todas las situaciones difíciles e incomprensibles de mi vida hay un porqué. Por la fe, me pongo incondicionalmente en las manos de Dios y rezo, como María: “que se haga en mí según tu palabra”.

Gozos...

Padrenuestro...
Avemaría...
Oración de conclusión...
Y Gloria.


Fuente: http://www.expeditosan.com.ar/sanexpedito/historia.htm